Taj Mahal

Después de 6 horas en coche de Ranthambore a Agra, hemos llegado a uno de esos momentos importantes del viaje, nos presentamos delante del Taj Mahal, una de las siete maravillas del mundo. Nos ha fascinado! Es sin duda, el monumento más espectacular que hemos visto en nuestras vidas, la construcción del hombre más impactante. Grandioso, blanco y resplandeciente se erige en la explanada, rodeado de jardines. Es una construcción de una simetría y unas proporciones perfectas, que le confieren un equilibrio y una elegancia, majestuosas. Majestuosa, esa la palabra que encaja y describe a la perfección esta maravilla.

Hemos estado cerca de cuatro horas contemplándolo sin cansarnos, de hecho cuando íbamos saliendo, costaba no girarse para volver a verlo.

A todo esto, para entrar en el recinto, hemos tenido que dejar tanto la maleta pequeña donde llevamos todo lo de valor, como la grande con la ropa y demás en el coche de Raj, nuestro conductor. Hoy era el último día con él y mentiríamos si dijéramos que no veíamos clara la jugada… De repente, lo tiene todo. En su coche nuestras seis mochilas, con todo ( excepto pasaporte y tarjetas que llevamos escondidos ). Si nos la hace, vaya traje… A las 7 hemos llegado al punto de encuentro y allí estaba, con una sonrisa y preparado para la despedida.Unas fotos, unas frases en su libro de visitas, la propina y hasta siempre… Continuamos el viaje.

Esta noche hemos realizado el trayecto Agra – Varanasi en un tren nocturno. Ha sido toda una experiencia, pero esta, esta ya es otra historia…