Juntos en Salvador esperamos la llegada de Guiem, un amigo que hemos echado bastante de de menos. La huelga de policía militar parece que está llegando a su fin unos días antes del carnaval, el balance 146 muertos en diez días de inseguridad. Paseamos por el Pelouriño, el casco antiguo de Salvador vibrando con los grupos de percusión que recorren sus calles, justo antes de ir al aeropuerto a recibirlo. Se abren las puertas de llegadas y empiezan las risas y abrazos, tras tres vuelos, buena cara para alguien a quién no entusiasman los aviones.
Quedan cinco días para Carnaval, dedicamos uno a visitar Salvador, ponernos al día y enloquecer con un concierto de Carlinhos Brown, aquí en su casa. Al día siguiente, ponemos rumbo a Morro de Sao Paulo, una isla paradisíaca situada a dos horas de ferry de Salvador. Sus pequeñas dimensiones, su ambiente y su gente la convierten en un destino perfecto. Pasamos tres días en la playa, tirados en la arena, consumiendo cocos y aprendiendo a jugar a futvolley, un deporte que en este país alcanza otra dimensión. El tiempo transcurre lentamente en esta porción de tierra perdida en el océano, sin embargo, llega el día de volver. Una lástima. En el camino de vuelta, un mar embravecido parece querer pasar factura a la gente por tanto disfrute, consiguiendo palidecer las pieles bronceadas de los pasajeros. Se agotan las bolsitas de plástico.
Llegamos a Salvador. Un ambiente festivo inunda las calles. Música, disfraces, amigos y familias compartiendo cerveza fría en la calle bajo un sol asfixiante. La ciudad se está preparando para recibir el acontecimiento del año. En unas horas el país va a enloquecer durante una semana y su gente se va a entregar en cuerpo y alma a su fiesta más deseada. Vamos a la casa, preparamos algo rápido para comer y nos engalanamos. Canciones brasileiras de carnaval suenan fuerte mientras nos colocamos la fantasia, camiseta o disfraz necesarios para participar en el Blogo. En Salvador, el Carnaval consiste en el desfile diario de varios Blogos por sus calles. Los Trios Eléctricos, grandes camiones con un escenario arriba, van circulando lentamente mientras un artista de renombre canta durante todo el recorrido para la gente del blogo. Esta, ataviada con una misma camiseta, rodea el camión, cantando, bebiendo y festejando. Las calles son un mar de gente. Recorremos Barra, una avenida en primera línea de mar bajo la mirada de miles de personas que bailan y cantan desde balcones, palcos y resto de calles.
Al día siguiente, participamos en un blogo algo diferente. Dani un amigo gallego que lo dejo todo para venir a Brazil con Claudia, una beleza brasileira de Salvador con quien se ha casado, llega hoy desde Rio. Nos han invitado a participar en un blogo algo más informal. Nos cita en un lugar y al llegar encontramos un centenar de hombres vestidos de novia sembrado la locura en la calle. Armandas con botes de espuma y falos de todo tipo, cortan la circulación, paran coches y los redecoran, bailan sobre los camiones, acosan a viandantes… En medio de este ambiente festivo aparece Dani con nuestras fantasias. Nos las ponemos y nos transformamos. Empiezan unas horas de locura y desfile por las calles de Salvador.
Un día más tarde, después de pasear por la parte más negra de Salvador, volamos hacia Rio. Llegamos muertos. Dani y Claudia nos ha dejado su piso, mientras están en Salvador. Si Brazil es caro, en carnaval los precios son una locura. Pasamos dos días en Rio, donde el Carnaval es más callejero y libre que en Salvador. La fiesta está en la calle y es abierta. No es tan puro, pero es más accesible. Después de alguna fiesta en la playa, nos vamos a Ilha Grande, a recuperarnos de tanto exceso. Una isla donde no hay otra cosa que hacer que caminar hasta sus diferentes playas a través de la selva, tirarse en la arena, jugar a palas o todas estas actividades que adoramos. Pasamos dos días de calma y relax. Damos con un pequeño restaurante que prepara una especie de arroz de pescado y mariscos que nos hace saltar las lágrimas. Se acerca el fin del viaje y últimamente estamos hablando mucho de los platos que echamos de menos y que comeremos al llegar. Para el último día, reservamos una tarde de pesca. Llegamos al barco y el capitán, un tiburón sonriente de prominente barriga y extraño sentido del humor, nos hace esperar una horita. Al final, llegan unos cuantos amigos suyos que también vienen a pescar. Ya que tengo a los turistas que pagan, llamaré a los amigos para ir a pescar, debió pensar. Media hora más tarde, llegamos al lugar, nos dan los volantines y nos dicen que ya podemos empezar a pescar. ¿Y el cebo? Preguntamos. No es necesario, responden. ¿¿Cómo?? Ya nos vemos haciendo el indio toda la tarde en la barca sin pescar nada. Somos pescadores de reconocido prestigio en el Mediterráneo y sentimos que nos están tomando el pelo como a unos turistas más. Resignados, hacemos las primeras caladas. A la media hora, para nuestro asombro, empiezan a picar. Es algo increíble. Con un gran banco de peces rojos a unos cuatro metros de profundidad, es tirar y sacarlos de tres en tres… Hay momentos de auténtica locura. Pasamos algunas horas. Una gran tormenta que se aproxima acaba con todo. Es momento de plegar y dirigirnos a puerto antes de que nos caiga toda esa agua en la cabeza. Los rayos avisan con antelación. De camino a puerto, limpiamos los pescados y los cocinamos en una pequeña parrilla habilitada en el barco. Recién pescados saben a gloria. Al día siguiente, volvemos en Rio.
Es el último día de Guiem, y nos toca un tour por la ciudad. Nos levantamos pronto y visitamos las atracciones más famosas de Rio. El Pan de Azúcar, El Cristo de Corcovado, Maracaná y el Sambódromo. Rio es una ciudad bellísima. Las ciudades que tienen un rio, un lago o el mar son diferentes. Rio, tiene muchísima playa, kilómetros y kilómetros. Las famosas Botafogo, Flamengo, Copacabana o Ipanema rodean el núcleo urbano. Son centro de reunión y diversión. Amantes del sol y del deporte, los habitantes de Rio disfrutan en la arena. Mucho ejercicio, muchos grupos de amigos sentados charlando, parejas queriéndose en la arena y niños jugando con las olas. Un lugar de desestress para una sociedad muy competitiva. Desde el Pan de Azúcar y desde el Cristo se puede observar la ciudad. Vista desde arriba es aún más bonita. Quizás sea lo que hace que no sea otro monumento más. Es cierto, que verlo al atardecer o iluminado por la noche desde la playa de Copacabana, como si de un guardián protector de la ciudad se tratara, es algo especial. Sin embargo, no creemos que esté a la altura del resto de Maravillas del mundo que hemos tenido la suerte de visitar este año. Dicho esto, es muy recomendable. Acabamos el día visitando los exteriores de Maracaná, que está en obras pues será sede de la final del mundial de fútbol dentro de dos años, y el Sambódromo, epicentro del Carnaval en Rio. Despedimos a Guiem que después de dos semanitas vuelve a casa. Han sido dos semanas fantásticas. Muchas risas, muchas batallitas y muchos planes de futuro que nos hacen sentir más cerca de casa. Guiem se va con una sonrisa, ha disfrutado y nos ha hecho disfrutar. Gracias Nataly!
Con la despedida de Guiem, damos el viaje prácticamente por acabado. Ya no nos moveremos de Rio. Esta es, la última parada. En unos días… Volvemos a casa!!!
Atansiooo conexioooo... molt galactic!!!! encara tenc es capet per allà, quina disfrutada!!! Gracis a tots per tot... VIATGE INOLVIDABLE!!!
ResponderEliminarEgoistament, he de dir que estic molt content de q torneu a sa roqueta...ja està bé de donar voltetes pel món!!!! Una aferrada molt forta i fins aviat!!!
Quina puta envejaaa cabrooons! joe quina crema de fotos.. vaya galactics!
ResponderEliminarasterix
ResponderEliminarlo fotut de que s'atraquin aquetes feches, es que tots mos quedarem sense poder obrir es blog i veure lo que anaveu fen pel mon,que de veritast, vist axi pereix molt mes petit de lo que mos pensavem, pero pel contrari mos heurem pesat un any molt bo i que també ha passat molt aviat, TOT, TOT HA ESTAT MOLT COLLONUT.
curepos es una pasada vaya un final de viatge,ja vos añoram tornau prest
ResponderEliminarMandar una foto de esa primera paella! Estoy deseando verla y que me deis un poquito de envidia :-) Recuerdos para los tres! Nos vemos pronto (en los bares claro :-)
ResponderEliminarTendras foto de la paella. Buen viaje y suerte!
EliminarSee deberia ser el ultimo post del blog. De vuelta en casa con la deseada paella. Sin texto ni comentarios, solo las caras de felicidad :-)
EliminarTiiiiooos!!! Que novias más sexys....!!!!XD
ResponderEliminarSeñores esto se termina, la pregunta cuando es el proximo cierre? Cuando estareis en palma?
ResponderEliminarSeñores esto se termina, la pregunta cuando es el proximo cierre? Cuando estareis en palma?
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